Carlos de Cristóbal. 12/11/2013
Sólo hay que dar un pequeño paseo por Madrid para darse cuenta de lo grave del problema. Calle tras calle, barrio tras barrio, las montoneras de basuras son ya parte del decorado urbano. La huelga de recogida de basuras comenzó a las 00:00 horas del martes 5 de noviembre. Desde entonces la cantidad de residuos en las calles no han hecho más que aumentar.
El problema es aún mayor si además vemos como de forma sospechosa los cubos, papeleras y contenedores están tirados por el suelo con su contenido esparcido por doquier. Ya se hace complicado incluso andar en linea recta; empiezan a ser necesarias aptitudes de atleta para sortear los obstáculos.
Pero lo peor aún puede estar por llegar. Las temperaturas tan agradables que estamos teniendo en este otoño pueden favorecer la proliferación de plagas. Los insectos y roedores nunca lo han tenido tan fácil para comer en Madrid.
Entre las principales especies plaga que pueden verse beneficiadas por toda esta comida gratuita en forma de basura, se encuentran los habitantes de las alcantarillas, rata gris (Rattus norvegicus), cucaracha oriental (Blatta orientalis) y cucaracha americana (Periplaneta americana.) A ellas se sumarán otros comensales oportunistas como gatos y perros callejeros, palomas, cuervos... y con ellos también se verán beneficiados sus parásitos (pulgas, ácaros y gérmenes.)
Es por todo esto que conviene dar un toque de atención sobre el peligro que una huelga de estas características durante un tiempo tan prolongado puede conllevar. Ya han pasado 8 días desde su inicio y aún puede durar algunos días más (esperemos que no.) Pero, aunque terminara en este mismo momento, aún tendríamos basura para algunos días más. Según se establece en el pliego de condiciones del concurso de esta contrata, en el caso de huelga, si esta dura más de 6 días, las empresas adjudicatarias tendrán 72 horas para reestablecer la normalidad. Por lo tanto, en el mejor de los casos, aún nos quedan tres días de convivir con nuestras propias basuras, y son tres días más en los que nuestras amigas las plagas aún pueden alimentarse y engordar. La buena noticia es que por lo que parece, las temperaturas descenderán de forma acusada en las próximas jornadas, con lo que los insectos no lo tendrán tan fácil. Esperemos por el bien de todos que esta huelga no dure mucho más.